Pablo dice que el evangelio es "poder de Dios para la salvación de todos . . ." (1.18), pero ¿Por qué necesitamos todos la salvación? Pablo contesta la pregunta en Romanos 1.18-3.20, así que empezamos con las malas noticias.
TEXTO CLAVE: Romanos 1.1 "Ciertamente, la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los seres humanos."
LEE Romanos 1.18 hasta 2.4 (más o menos)
LA IRA DE DIOS SE REVELA CONTRA TODA LA HUMANIDAD (1.18)
LA IRA DE DIOS SE REVELA CONTRA TODA LA HUMANIDAD (1.18)
- PORQUE todos tienen conocimiento de Dios (La Primera Razón - Rom. 1.19-20)
- sus cualidades invisibles
- su eterno poder
- su naturaleza divina
- (no es un conocimiento pleno, pero sí es suficiente)
- POR MEDIO de la creación (SU creación)
- la gloria invisible de Dios se refleja en la creación visible de Dios
- DE MODO que nadie tiene excusa
- (porque todos tenemos acceso a esta información, no tenemos excusa -- los teólogos llaman esta información la "revelación general")
- PORQUE todos han rechazado este conocimiento (Segunda Razón - Rom. 21-23)
- no Le glorificaron como Dios
- no Les dieron gracias (resulta en 1.21b-22)
- en vez de glorificar al Creador y darle gracias, glorificaron y dieron gracias a las cosas creadas, desde el ser humano hasta los reptiles
- COMO CONSECUENCIA . . . (uh oh -- Rom. 3.24-32)
- Dios "los entrego" (lo dice tres veces: 1.24, 26, 28) a sus propios deseos: la inmoralidad sexual, la idolatría, la homosexualidad y una mente depravada con todas sus consecuencias (envidia, avaricia, homicidio, arrogancia, deslealtad, etc)
- Es decir, NUESTRA "LIBERTAD" ES UN CASTIGO DIVINO. Es cierto que hay un juicio final (Rom. 2.5), pero Pablo dice in 1.18 que la ira de Dios "se revela" contra la humanidad ahora mismo (en el presente), y lo hace en una forma pasiva, no activa. Dios nos deja hacer lo que nos de la gana, y así nos castiga. Si deseamos vivir sin Dios, Dios nos lo deja hacer y así vivir con las consecuencias. Es como dejar a tu hijo comer todos los días en McDonald justo como quiere (ver abajo), pero mucho más fuerte (no somos niños). Si somos sinceros, tenemos que admitir que casi todo el mal del mundo es la consecuencia de hombres y mujeres haciendo lo que quieren hacer, sin tomar en cuenta la voluntad y el plan (perfecto y benigno) de Dios para su creación y para la humanidad.
- ES CURIOSO que echamos la culpa a Dios por los problemas del mundo cuando somos nosotros las causas. Cuando tengo problemas con mi mujer, es casi siempre porque, en vez de amarla y sacrificarme por ella como Dios quiere, actúo en una manera egoísta y estúpida. Hago lo que YO quiero y, curiosamente, al final tengo que vivir con las consecuencias (conflicto, división, etc.) -- ¡Gracias a Dios que mi mujer es más santa que yo y me perdona!
¡OJO! EL HOMBRE "MORAL"
Al leer Romanos 1, la respuesta típica del hombre religioso/moral es decir: "Pues, es lo que merecen, los estúpidos paganos." Quizás no lo decimos en una forma tan fuerte, pero actuamos así cada vez que vemos a una pecadora y nos falta la compasión, juzgando a la persona como si fuésemos mejores o, incluso peor, que fuésemos el Juez.
Pablo nos avisa, "Por tanto, no tienes excusa tú, quienquiera que seas, cuando juzgas a los demás, pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo, ya que practicas las mismas cosas." (Romanos 2.1)
Según Pablo en Romanos 1-2, tanto el gentil (no judío) como la persona moral está bajo el poder del pecado y merece la ira y condenación de Dios. La semana que viene hablaremos de la situación del Judío, miembro del pueblo de Dios y recipiente de Su ley. Es decir, tenemos una semana más de malas noticias antes de llegar a las BUENAS NOTICIAS. Ten paciencia.
(UNA PREGUNTA EXTRA: ¿Qué tiene que ver Romanos 10.12-15 con lo que acabamos de aprender en Romanos 1.18-32?)
Al leer Romanos 1, la respuesta típica del hombre religioso/moral es decir: "Pues, es lo que merecen, los estúpidos paganos." Quizás no lo decimos en una forma tan fuerte, pero actuamos así cada vez que vemos a una pecadora y nos falta la compasión, juzgando a la persona como si fuésemos mejores o, incluso peor, que fuésemos el Juez.
Pablo nos avisa, "Por tanto, no tienes excusa tú, quienquiera que seas, cuando juzgas a los demás, pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo, ya que practicas las mismas cosas." (Romanos 2.1)
Según Pablo en Romanos 1-2, tanto el gentil (no judío) como la persona moral está bajo el poder del pecado y merece la ira y condenación de Dios. La semana que viene hablaremos de la situación del Judío, miembro del pueblo de Dios y recipiente de Su ley. Es decir, tenemos una semana más de malas noticias antes de llegar a las BUENAS NOTICIAS. Ten paciencia.
(UNA PREGUNTA EXTRA: ¿Qué tiene que ver Romanos 10.12-15 con lo que acabamos de aprender en Romanos 1.18-32?)
